Ingredientes
- Lubina 1 pieza (1 kg aprox)
- Aceite de oliva 100 ml
- Limón ½ unidad
- Ajo 2 dientes
- Guindilla / Cayena 2 unidades pequeñas
- Sal al gusto
Lubina al horno
Esta mañana, en el mercado, me ha sorprendido una señora al decirle al pescadero que nunca había hecho Lubina al horno. Con lo sencillo, limpio y rápido que es hacerla, pensé yo.
Esta receta es de Lubina al horno, pero sirve para muchos pescados: Dorada, Rodaballo, Merluza, Lomos de Merluza, Lomos de Lubina, Bacalao fresco, Virrey y todos aquellos que se os puedan ocurrir de tamaño y características similares.
La lubina al horno hecha de esta forma queda con un sabor delicioso y la salsa es de esas en las que apetece hacer un barquito mojando pan.
Instrucciones
- Reúne los ingredientes para tenerlos a mano.
- Precalienta el horno a 190ºC.
- Lava el pescado bajo un chorro de agua fresca. Para esta receta, en la pescadería debes pedir que te limpien y preparen el pescado para hacerlo al horno. Escúrrele con la mano el agua todo lo que puedas.
- Deposita la lubina en una fuente de horno.
- Pelamos los ajos (también se pueden emplear los dientes de ajo limpios pero sin pelar, ligeramente aplastados con el cuchillo).
- En una sartén, con el aceite de oliva, doramos ligeramente los ajos pelados y las guindillas pequeñas (este paso es opcional, se pueden añadir a la fuente los ajos y las guindillas sin haberlos dorado, nadie notará la diferencia).
- Vertemos el aceite, ajos y guindillas en la fuente de horno.
- Añadimos el zumo de ½ limón y con una cuchara distribuimos salsa por encima del pescado para que el aceite lo cubra y los demás ingredientes le den aroma.
- Introducimos la fuente en el horno a media altura con calor arriba y abajo y bajamos la temperatura a 180ºC.
- Dejamos que se vaya haciendo y a partir de los 20 minutos podemos ir comprobando el punto de cocción del pescado, sacándolo del horno y practicándole algún corte (por estética, buscando algún lugar discreto cerca de la espina) para ver el color en su interior y así dejarlo a nuestro gusto.
- Conviene recordar que el pescado debe quedar en su punto, pero es preferible quedarse corto de tiempo que pasarse.
- En esta receta no hay problema en abrir y cerrar el horno, cuando consideres que ya puede estar hecho el pescado.
- Al manejar la fuente, usa siempre una manopla de cocina para evitar quemaduras accidentales.
- Saca la lubina cuando esté horneada al punto que consideras adecuado. Puedes servirla en la mesa en la propia bandeja o bien emplatarlo, momento en el que con ayuda de una cuchara se vierte un poco de salsa por encima. Recuerda que ese día no debe faltar un buen pan que acabará pringado de salsa.
Sugerencias.
Como guarnición puedes añadir patatas fritas o como prefiere un amigo mío unos trozos de tomate sin aliño, pero con algo de generosidad de sal.
No obstante lo que mejor le encaja a este pescado son unas patatas panaderas. Para hacerlas, antes de ponerte a hacer el pescado debes pelar unas patatas, lavarlas, cortarlas en rodajas de medio centímetro de grosor, añadirles sal, casi-freírlas y distribuirlas, haciendo una cama, en la fuente de horno en la que vas a hacer el pescado. Cuando hayas hecho esto continúa con los pasos de la receta del pescado.
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